Mensaje propositivo del exalcalde Sergio Naranjo, al alcalde Daniel Quintero, EPM, empresarios y la sociedad civil
En diálogo con IFMNOTICIAS, el exalcalde Naranjo, explicó que el pronunciamiento público que hace a modo de llamado constructivo para que se superen las diferencias; parten de su experiencia en el manejo de la ciudad y de EPM, en medio de un contexto que, para su época, permitió la participación democrática y realizar la gran transformación, que le ha permitido hasta el momento, alcanzar la grandeza y la multicapacidad para participar en negocios diversos no solo en Antioquia y Colombia, sino a nivel internacional.
Esa experiencia, lo lleva a reconocer el capital humano que tiene la empresa, un capital acumulado de conocimiento y talento de personas que hacen que EPM sea exitosa y ese reconocimiento es fundamental para que se pueda continuar por el camino de ser la empresa de servicios públicos, más exitosa de América Latina. Pero para ello, dice Naranjo Pérez, hay que resolverlo, asumiendo con responsabilidad lo que ha ocurrido, y con una dosis de humildad y paciencia, comenzar a reconstruir la confianza, para desactivar las pugnas y así, reconstruir el diálogo democrático y respetuoso, que ha marcado siempre a EPM.
Para el exalcalde de Medellín, no se debe perder la tradición de afrontar las grandes dificultades, ofreciendo igualmente, grandes soluciones de manera consensuada y señala que esa es la clave que ha tenido siempre EPM y la Alcaldía de Medellín, por lo que además invita a recordar, que con buena voluntad todo es posible.
En el diálogo con IFMNOTICIAS, Sergio Naranjo, quien estuvo ausente de la ciudad por varios años y regresó en febrero pasado, ve una ciudad con oportunidades de recomponer su diálogo social y es claro que quien tiene que dar el primer paso, es el Alcalde Daniel Quintero y le sugiere de manera respetuosa, dar ese paso, “no necesariamente pidiendo disculpas, pero sí haciendo un pronunciamiento público en el sentido de comprometerse a respetar el acuerdo de 2007 de buen gobierno y gobierno corporativo de Empresas Públicas de Medellín”.
En su visión, si el alcalde Quintero da ese paso, está convencido que los empresarios, empleados, gremios, concejo y toda la sociedad antioqueña, respaldarán la recomposición de ese diálogo y podrá superarse esta crisis que no es buena para nadie y remitió a su carta abierta en la que hace propuestas concretas para recomponer la situación que se vive actualmente.
En esa carta a la que refiere, el exalcalde recuerda que ya el tiempo de intervención de EPM por parte de la Superintendencia de Servicios Públicos, se acerca y antes de que llegue ese tiempo, propone que no solo se nombre urgentemente a la Junta Directiva, que ya lo hizo el alcalde la noche anterior, sino que es necesario: reconstruir la tranquilidad del mercado, garantizar la terminación de HidroItuango, recuperar la confianza interna y cumplir con el régimen del control.
En el mismo escrito, Naranjo le hace una recomendación, que anota, es desinteresada -como alguien que se retiró de la política hace más de 10 años,- de aprovechar el periodo de gobierno que tiene, que por demás, es muy corto, haciendo un alto en el camino y evaluando serenamente, lo que ha sucedido. Continua diciéndole que: “reoriente el rumbo en lo que sea necesario con humildad, prudencia, paciencia, responsabilidad y, por encima de todo, escuche a la comunidad que de ella se aprenden lecciones muy valiosas todos los días”.
Con esta recomendación cierra con una frase de José Ortega Gasset que dice: “Solo es posible avanzar cuando se mira lejos, pero solo es posible progresar cuando se piensa en grande”.
Queda ahora, como se dice en términos futbolísticos, el balón en la cancha del alcalde Quintero.
Este es el texto de la carta:
AL ALCALDE, A EPM, LOS EMPRESARIOS Y LOS ANTIOQUEÑOS
Una invitación a estar por encima de las pequeñeces
El sentido común nos dicta que es urgente recuperar la confianza, la comunicación interna, garantizar la estabilidad laboral y retomar los objetivos de la empresa. Se necesita una estrategia creativa e inteligente soportada en el excelente recurso humano de las EPM. Su sabiduría, conocimiento, experiencia y, sobre todo, el sentido de pertenencia y amor a toda prueba por la empresa, juegan un papel crucial en la solución.
Ya sabemos cuáles son los problemas. ¿Qué objeto tiene seguir polarizando el tema y ahondando enfrentamientos inútiles que no construye nada bueno? Esta situación le está causando a EPM un daño enorme que pone en peligro su sostenibilidad, crecimiento, competitividad –y lo que es más grave– sus utilidades, pues de estas depende la inversión social de Medellín y eventualmente podría afectar la seguridad energética de Colombia.
Yo me atrevería a sugerir una estrategia integral de cinco puntos para salvar el patrimonio público más importante de los antioqueños.
1. LA JUNTA DIRECTIVA QUE EPM SE MERECE: EPM requiere una junta directiva con gente idónea, transparente, independiente, con amplio conocimiento y amor por la ciudad y la empresa, siendo rigurosos en el cumplimiento del régimen de incompatibilidades e inhabilidades pues los intereses que deben defender son los de EPM y los de Medellín, no los de uno u otro alcalde.
Necesitamos un compromiso público del Alcalde de Medellín y la nueva junta declarando que van a respetar los estatutos, el acuerdo marco de gobernabilidad firmado por el Municipio y EPM en 2007 y los códigos de buen gobierno corporativo que señalan que el alcalde solo se debe intervenir en la administración de la empresa a través de la junta directiva que él preside.
El gerente y la junta deben discutir alternativas productivas como el retiro definitivo de la solicitud de conciliación elevada a la Procuraduría, o bien, la reformulación de los términos de la conciliación teniendo en cuenta la historia que se ha construido entre los diferentes actores relacionados con el proyecto Hidroituango.
2. RECONSTRUIR LA TRANQUILIDAD DEL MERCADO: Debe darse un parte de tranquilidad a los inversionistas, a la banca nacional y extranjera, al mercado de seguros, a las calificadoras de riesgos –entre otros– mandando un mensaje claro y contundente que reconstruya la confianza institucional.
Por extensión, se elimina el riesgo país porque vamos a necesitar crédito externo para la reactivación económica, pues los recursos de una nueva reforma tributaria solo se verán a partir de 2022.
3. GARANTIZAR LA TERMINACIÓN DE HIDROITUANGO: Cumplir con el nuevo cronograma de la obra entregando la primera unidad de 300MW en el primer semestre de 2022, asignando todos los recursos que sean necesarios y logrando los acuerdos con los ajustes del caso para conseguir el objetivo en los tiempos acordados.
De igual forma, evaluar y replantear el negocio de Electricaribe antes de asumir la
operación el 30 de septiembre con los ajustes que se necesiten en sus cláusulas a raíz de los cambios que se han presentado con motivo de la pandemia como son el incremento en las pérdidas operativas y el rezago en la facturación de los clientes.
4. RECUPERAR LA CONFIANZA INTERNA: Mejorar los canales de comunicación y colaboración interna entre la gerencia y los empleados. Recobrar el clima de confianza entre todos los sectores involucrados y garantizar la estabilidad laboral para eliminar ese panorama de incertidumbre que reduce la productividad y los buenos resultados institucionales. El capital humano y el excelente equipo técnico hacen parte del éxito histórico de EPM.
5. CUMPLIMIENTO DEL RÉGIMEN DE CONTROL: ¿Dónde han estado el control fiscal, el control interno y la auditoría externa? El control fiscal debe ser ejercido por la Contraloría General de Medellín en los términos de la Constitución y la ley. Igualmente, el control interno debe ceñirse a lo establecido en los artículos 209 y 269 de la Constitución Política. Cuando los dos primeros controles no operen, EPM puede recurrir a una auditoría externa. La Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios determinan si los controles interno y fiscal se han cumplido a cabalidad.
Alcalde, se lo digo desinteresadamente –como alguien que se retiró de la política hace más diez años cuando asumí la Rectoría de la Universidad Autónoma Latinoamericana– un período de gobierno es muy corto, aprovéchelo. Haga un alto en el camino, evalúe serenamente lo que ha sucedido, reoriente el rumbo en lo que sea necesario con humildad, prudencia, paciencia, responsabilidad y, por encima de todo, escuche a la comunidad que de ella se aprenden lecciones muy valiosas todos los días.
Le dejo, para que medite en ella, una frase de un gran pensador español, durante uno de los momentos más críticos de la historia de su país, invitando a estar por encima de las pequeñeces y unirse alrededor de unos objetivos comunes que les permitiera construir una patria de la cual pudieran sentirse todos orgullosos.
“Solo es posible avanzar cuando se mira lejos, pero solo es posible progresar cuando se piensa en grande”. –José Ortega y Gasset
SERGIO NARANJO PÉREZ
Alcalde y Presidente Junta EPM (1995-1998)