Dentro del cúmulo de proyectos que fueron radicados en el Congreso de la República en el periodo que recién comienza, hay uno de acto legislativo que busca que todas las colectividades con personería jurídica puedan presentar lista en coalición para corporaciones públicas.
La propuesta ha caído mal en las formaciones políticas pequeñas pues consideran que las grandes les quieren arrebatar un beneficio que les da la posibilidad de pellizcarles unas curules. Por su parte, analistas piensan que de concretarse la iniciativa desdibujaría aún más a los partidos.
La Reforma de Equilibrio de Poderes, del 2015, estableció en la Constitución que “los partidos y movimientos políticos con personería jurídica que sumados hayan obtenido una votación de hasta el 15% de los votos válidos de la respectiva circunscripción, podrán presentar lista de candidatos en coalición para corporaciones públicas”.
Las coaliciones para cargos uninominales (Presidente de la República, Gobernador y Alcalde) ya existían, por lo cual la Reforma de Equilibrio de Poderes las habilitó para corporaciones públicas (Congreso, asambleas, concejos y JAL), aunque limitándolas a los partidos que obtuvieran las votaciones más bajas, lo que en la práctica les podría ayudar a competir frente a las colectividades más poderosas.
Sin embargo de esa fecha al día de hoy, las coaliciones para corporaciones públicas no han sido aún reglamentadas, por lo que para las elecciones de 2018 y 2019 las colectividades de la oposición tuvieron que acudir a la tutela para poder hacer este tipo de alianzas.
Con base en el fallo, los partidos Alianza Social Independiente (ASI), Movimiento Alternativo Indígena y Social (MAIS) y Unión Patriótica (UP) inscribieron en 2018 lista en coalición para las elecciones a Senado, alcanzando la votación suficiente para obtener cuatro curules, y también presentaron listas a Cámara de Representantes en las circunscripciones de Bogotá́ D.C., Cundinamarca, Risaralda, Bolívar, Tolima y Sucre.
Mientras tanto que en el Congreso permanece engavetado con ponencia para primer debate un proyecto que presentó la oposición con el ánimo de que sean reglamentadas estas coaliciones de partidos al tenor de lo que establece la Constitución.
En cuanto a la reforma constitucional que permitiría a todos los partidos hacer coaliciones a corporaciones públicas, fue presentada por parlamentarios de La U y Liberal. La iniciativa sobre el papel tiene chance de ser aprobada porque las colectividades grandes tienen las mayorías en el Congreso.
No obstante por tratarse de una reforma constitucional, el tiempo que toma su discusión en el Congreso y posteriormente el estudio de la Corte, es poco probable que entre en vigor en las elecciones legislativas del 2022.
Opinan expertos
Beatriz Helena Gil Ortegón, investigadora de Congreso Visible, de la Universidad de los Andes, dijo a EL NUEVO SIGLO que hace años los partidos políticos en Colombia se han ido desdibujando “porque son, como se dice coloquialmente, máquinas electorales, y no agrupaciones que se reúnen por sus coincidencias ideológicas”, aunque hay excepciones, anotó.
Agregó que este no es un momento fácil para los partidos porque les han renunciado varios parlamentarios y algunos grandes electores no van a participar en los comicios del 2022, “entonces están como alguien que nada desesperado porque se está ahogando” para tratar de armar unas buenas listas, pero “como saben que esto es difícil, quieren proponer las coaliciones para poder presentar listas en conjunto”.
Por su parte Felipe Botero, director de Congreso Visible, indicó a este Medio que “entiendo el espíritu de la participación y de permitir que los partidos pequeños sumen fuerzas para ganar curules y que haya pluralidad en las corporaciones, pero eso desdibujaba mucho el papel de los partidos en la idea de que haya partidos fuertes”.
Agregó que lo que están haciendo los partidos grandes ahora quitando la limitación para hacer coaliciones de que la votación sumada no supere el 15%, “es todavía más problemático porque entonces prácticamente va a acabar con los partidos”.
Añadió que la idea de los partidos es que le transmitan información a la gente, tengan una plataforma ideológica y sean como marcas que se pueda distinguir uno del otro, pero “si en cada región hay distintas coaliciones entre distintos partidos, uno no sabe finalmente quién es el que está gobernando, cómo está tomando decisiones ni qué tipo de políticas son las que va a representar”.
En tanto que Camilo Mancera, coordinador del Observatorio Justicia Electoral, de la Misión de Observación Electoral, dijo a este Diario que “desde la MOE siempre hemos manifestado inconformidad con la decisión de permitir las coaliciones para las corporaciones públicas, en la medida que encontramos que esta se convierte en una fórmula para debilitar el sistema de partidos políticos. Y segundo también lo que ocurre es que termina convirtiéndose en una fórmula con fines netamente electorales”.