El expresidente habla en la Comisión de la Verdad sobre su perspectiva sobre el conflicto armado.
El expresidente Andrés Pastrana Arango (1998-2002) hizo una defensa de su fallido intento de diálogo con las Farc, al indicar que el proceso de paz en El Caguán fue la semilla de los futuros procesos de negociación.
“Mucho se han tergiversado los procesos de paz de mi Gobierno. Hoy quiero recordar que pasamos de un Estado fallido a un Estado pujante. Es cierto que no logré la paz, pero puedo decir con certeza que lo que se ha avanzado es gracias a lo que nosotros sembramos”, dijo Pastrana.
Así lo manifestó el expresidente en una contribución voluntaria ante la Comisión de la Verdad con su perspectiva sobre el conflicto armado colombiano bajo su mandato.
“Sin el Plan Colombia no hubiera existido la seguridad democrática, sin aquellos procesos de paz, los acuerdos de La Habana no hubieran encontrado las bases de su construcción, sin nuestra lucha por los derechos humanos y la profesionalización de las Fuerzas Militares, la legitimidad del Estado se hubiera perdido”, dijo.
En la cita añadió que la búsqueda por la paz le costó su prestigio político ante el fallido proceso de negociación, que en todo caso fue apoyado por los representantes de múltiples partidos políticos y la comunidad internacional, entre otros.
“La guerrilla fue la que siempre buscó romper el proceso de paz”, dijo.
Pastrana recordó que hizo de la paz su propuesta de campaña entre la primera y la segunda vuelta presidencial y que fue en ese momento en que prometió reunirse con Manuel Marulanda, jefe guerrillero de las Farc, si este accedía.
En ese sentido, contó que la reunión fue siendo ya presidente electo, que del encuentro hay un video grabado, que en la cita también estaba el ‘Mono Jojoy’ y aseguró que ‘Tirofijo’ dijo expresamente que sí el presidente iba a la instalación de las negociaciones, él también lo haría.
El expresidente habló de la zona de distención e indicó que el despeje era una posibilidad que estaba en la ley y que fueron las Naciones Unidas, y personalidades como Juan Manuel Santos y Álvaro Leyva, quienes le recomendaron abrir ese espacio.
Y citó una carta en la que la guerrilla le anuncia que su vocero para el proceso sería Leyva.
“A pesar de eso mis opositores decían que Pastrana entregó la soberanía del Estado”, dijo el exmandatario al citar un fallo de la Corte Constitucional que habla sobre estos episodios que se dieron en el despeje.
Pastrana indicó que uno de los problemas que tuvo que atender fue el hecho que en medio de la zona de despeje se encontraba el Batallón Cazadores de las Fuerzas Armadas, que al final se dejó como sede del Gobierno sin armas. Igualmente mencionó diferencias entre el comisionado de Paz y el Ministro de la Defensa.
El expresidente relató que previo a la cita de la mesa de negociación, la guerrilla avisó de la captura de dos personas, que dijeron, habían sido entrenadas para atentar contra Manuel Marulanda. La mesa que estaba pactada para febrero se adelantó a enero y dijo que en efecto se confirmó que Marulanda no iba a acudir.
Pastrana dijo que decidió llevar dos discursos, uno por si iba y otro por si no iba, que decidió llevar a su hijo Santiago, y que su decisión fue la de cumplir su palabra.
“Dije si me deja la silla vacía Marulanda, yo me voy a sentar”, indicó Pastrana al señalar que el episodio demostraba que había un presidente que cumplía su palabra y que ese mal comienzo dejó no solo un sabor amargo, sino una lección de que el proceso “no iba a ser nada fácil”.
Además, narró que tiempo después, le comentaron la que habría sido la verdadera razón de Marulanda para no acudir a la cita. Según relató, Marulanda comentó que la imagen del saludo afectuoso, que seguramente sería emitida por todos los medios de comunicación, podría llevar a pensar que ya se había hecho un acuerdo de paz. Y que eso no era una realidad sino apenas un comienzo y que no podía permitir que ningún guerrillero dejara de disparar por creer que ya se había hecho la paz.
Pastrana habló de los acuerdos alcanzados para liberar a más de 300 uniformados secuestrados y de las trabas del proceso de paz. Precisó que siempre fueron las Farc las que congelaron el proceso hasta cinco veces.
“Siempre he sostenido que la paz atropelló a las Farc”, dijo Pastrana.
El exmandatario narró como el proceso fue en declive, cómo la guerrilla secuestró un avión, dinamitó un puente en Antioquia y querían dinamitar el acueducto de Bogotá, al tiempo que se comprobó que usaron la zona de despeje para cometer delitos.
El proceso se terminó con una alocución presidencial.
“Puedo salir hoy de aquí con la frente en alto, hice todo lo posible y lo que estaba en mis manos para hacer la paz en Colombia. No lo logré, tristemente no lo logré. Cuántas vidas se hubieran salvado, cuántos muertos hubiéramos evitado si se hubiera firmado la paz. La paz atropelló a las Farc, ellos no estaban preparados. Hicimos lo que estaba en nuestras manos“, insistió el expresidente quien reconoció que se cometieron errores y pidió perdón a las víctimas.
Pastrana entregó a la Comisión de la Verdad una carta de los capos del narcotráfico Miguel y Gilberto Rodríguez Orejuela que, según dijo, trata sobre la financiación de la campaña presidencial de Ernesto Samper.
“Aquí dejo una carta firmada por los hermanos Miguel y Gilberto Rodríguez Orejuela en la que afirma que Samper sí sabía de los ingresos de los dineros del narcotráfico en la campaña”, dijo Pastrana al padre Francisco de Roux, presidente de la Comisión.
Al hablar sobre las relaciones del narcotráfico con el poder y la guerrilla, Pastrana dijo que “el punto más crítico de sus intentos lo alcanzaron con la financiación de la campaña de Ernesto Samper por parte varios narcotráficantes, encabezados por el cartel de Cali. Con el tiempo se ha descubierto que hasta el ‘Chapo’ Guzmán ha confesado que dio dineros a esa campaña”.
Una carta en ese sentido, sobre la financiación de la campaña de Samper -reconocido enemigo político suyo- fue publicada por el expresidente Pastrana en su libro Memorias Olvidadas en el 2014.
Tras unas breves palabras de introducción de parte del padre Francisco de Roux, presidente de la Comisión de la Verdad, el expresidente Pastrana aseguró que acudió a la cita al estimar que “solo con la verdad se logra la paz”,
“Como colombiano y como expresidente vengo a esta institución, convencido del deber de todo colombiano de aportar al conflicto, vengo con la esperanza de que esta comisión debe salir un informe imparcial sin sesgos ideológicos ni exculpasiones políticas”, dijo al advertir que a “nadie le queda duda que invertí mi capital político para lograrla”, dijo el exmandatario.
En su intervención, Pastrana lanzó una fuerte crítica al expresidente Juan Manuel Santos por las actuaciones que llevaron a la firma del Acuerdo de Paz después de que el ‘no’ ganó el plebiscito por la paz.
“No logro entender por qué el expresidente Juan Manuel Santos decidió desperdiciar la oportunidad histórica de lograr un consenso en torno a los acuerdos de La Habana, tal como se lo propuse en un la reunión que cara a cara estuvimos en la Casa de Nariño después de los resultados del plebiscito”, dijo.
“El Sistema de Verdad, Justicia y Reparación nació con esa mancha que el entonces presidente le impregnó”, dijo Pastrana quien apoyó la extensión del mandato de la Comisión de la Verdad, que está en debate en la Corte Constitucional.
Además, el expresidente Pastrana dijo “fue en mi gobierno en donde se comenzaron a acabar las Autodefensas. En mi gobierno Carlos Castaño renunció a liderar a las AUC”. Añadió que desde la campaña dejó en claro que no iba a dar estatus político a los paramilitares.
“Me correspondió un complejo periodo de la historia en el que quedaron sembradas muchas semillas que hoy están dando fruto. Puse todo mi empeño por lograr la paz”, insistió.
En su narración, el expresidente habló sobre los operativos realizados durante su gobierno contra el paramilitarismo, sus redes de financiación y de comunicación, tocando a jefes de las AUC como Salvatore Mancuso, ‘Julián Bolívar’ y el propio Castaño.
Según Pastrana, como retaliación a un mega operativo, Mancuso le habría dicho a Castaño que iba a poner carros bomba y, Castaño, lo habría desautorizado. Y supuestamente habría dicho que no iba a ser el próximo Pablo Escobar de Colombia. Luego, hubo una manifestación pública de separación entre ambos.
“No íbamos a permitir que con el pretexto sarcástico de proteger a la población contra la guerrilla se organizaran fuerzas oscuras que contribuían a aumentar el conflicto y a debilitar las Fuerzas Armadas y con ello nuestra democracia”, dijo.
Los Comisionados le preguntaron al expresidente Pastrana sobre la operación ‘Berlín’, lanzada por las Fuerzas Militares en noviembre de 2000, en la que fallecieron menores que las Farc habían reclutado.
En su respuesta, Pastrana dijo que en su gobierno se hicieron capacitaciones en derechos humanos en los batallones, que fueron capacitados en ello 120.000 soldados y que si bien no recuerda el operativo en específico, está seguro que si hubo tales violaciones de derechos humanos, las denuncias tuvieron que haber salido del mismo Ejército.
“No recuerdo los hechos concretos de la Operación Berlín. Si hubo violaciones o excesos, estoy absolutamente seguro que el general (Fernando) Tapia los presentó e hizo las denuncias correspondientes”, dijo.
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