- La actividad de reciclaje y aprovechamiento de residuos ha sufrido un estancamiento del 29% desde el año 2021.
- Medellín tiene más de 2.600 punto críticos de basuras, de los cuales 48% se concentran en Belén, La candelaria, Guayabal y Laureles.
Hoy Medellín está a punto de vivir una emergencia sanitaria a causa de la recolección de residuos sólidos, fue la conclusión a la que llegó el concejal Luis Bernardo Vélez, quien hizo citación a Empresas Varias- Emvarias y a la Secretaría de Medio Ambiente de Medellín.
Según el Corporado, el vaso sanitario Altair se acerca al final de su vida útil y Emvarias se encuentra desfinanciada para desarrollar la construcción del nuevo vaso La Piñuela, que tendría un costo de más de $400 millones de pesos y llevaría a la empresa a buscar la de inversión de un privado.
Vélez cuestionó la implementación de lo que sería el proyecto piloto de cargue lateral, ya expuesto por el alcalde Daniel Quintero y por el gerente de Emvarias, Carlos Borja, añadiendo que la iniciativa costaría $250.000 millones de pesos, monto que, según él, supera la inversión de la Estación de Transferencias y que además no supliría la totalidad de las necesidades que hoy tiene la ciudad.
Para terminar, expresó que Emvarias no pasa por un momento administrativo, político y financiero que le permita ser una empresa viable para responder a la emergencia sanitaria que representa el manejo de los residuos en la ciudad.
A su turno, el concejal de la segunda bancada citante, Julio González Villa, indicó que Emvarias no resuelve la problemática de las basuras en la capital antioqueña, en principio porque no se separa la basura, sino que se compacta y dicha acción representa retroceso en los procesos de salubridad.
Para el cabildante del Centro Democrático, la tarifa de cobro para recuperación de los costos que representan el servicio incurre en montos que no solucionan los costos ambientales y de saneamiento para los ciudadanos.
El también citante, concejal Simón Pérez, indicó que esta es una discusión de salud pública y ambiental no solo estética, que obedece al aumento de la población y a las nuevas dinámicas de producción y consumo, que en consecuencia ponen en evidencia deficiencias administrativas y la falta de formación en cultura ciudadana.
Demás Corporados que intervinieron presentaron posiciones encontradas, mientras algunos consideraron que el crecimiento de la ciudad pone en vilo la necesidad de avanzar en estudios serios sobre el proyecto de cargue lateral para evitar el futuro detrimento del patrimonio público, otros consideraron que este proyecto debe frenarse totalmente, aludiendo no ser compatible con las necesidades actuales del territorio.
En su presentación, Carlos Borja, gerente de Emvarias, argumentó que el vaso La Piñuela representa una mayor complejidad en su construcción por las condiciones del suelo, por lo que requiere mayor inversión para iniciar la obra y el adelanto de estudios permite hacer invitación privada de ofertas a empresas que estén en la capacidad de ejecutar este tipo de proyectos.
Para finalizar, frente al tema de la renovación vehicular, insistió que se cuenta con 71 vehículos nuevos, que permitirán mejorar el tiempo de recolección y conectarse con el piloto de cargue lateral y ser así más eficientes en la recolección de residuos.
Por su parte, la secretaria de Medio ambiente, Vanesa Álvarez, expresó que esta dependencia realiza un acompañamiento a las organizaciones de recicladores en las garantías laborales y procesos de formalización. Y respecto al proceso de contenerización que se adelanta manifestó que, un porcentaje será destinado a los recicladores para mejorar la labor que realizan.
Según el concepto de expertos invitados a la plenaria, el proyecto de cargue lateral ofertado por la empresa Themac genera desconfianza. Agregaron que este proyecto piloto de cargue lateral generaría incompatibilidad con la estación de transferencia, tema reiterativo de la discusión.
“Reciclaje para los recicladores” es una de las arengas de la comunidad asistente a este debate que manifiesta su descontento con las directrices de Emvarias y al unísono rechazan las rutas de reciclaje implementadas por la empresa, así como el ya mencionado cargue lateral, que, según ellos, impactaría de manera negativa en la contratación de personal para la recolección.